No pensemos, sin embargo, que el culpable es un sistema, o la sociedad, o un Estado, o una persona. Son nuestras propias ilusiones las que nos van defraudando. Todo comienza en el calor del vientre materno y el descubrimiento de que hace frío allá afuera.
¿Y acaso es culpa del frío que haga frío?
Anthony Burgess